Durante décadas, el fútbol legitimó la frase "de los segundos no se acuerda nadie". Hasta que apareció Simeone, la excepción a la regla, quien salió a contrarrestar el intento de los jugadores de Boca de querer minimizar el título conquistado por River. Y entonces, con el cuchillo entre las teclas, fijó su postura vía celular: --¿Qué opinás acerca de las declaraciones de algunos jugadores de Boca sobre el título de River?
--No leí nada, ¿qué dicen?
Y tras hacerse el desentendido, se plantó...
--Que el título de River tomó más importancia porque Boca quedó eliminado en la Copa, y que el partido contra San Lorenzo, Boca no lo perdía.
--... Boca tiene un gran plantel, que está acostumbrado a salir primero... Por eso los entiendo: es doloroso ser segundo.
Contundente. Y directo al mentón. ¿Debate terminado o apenas un round más en la batalla de chicanas entre los grandes?
Durante la semana, el Cholo había reforzado su postura de que "River, como campeón, es el mejor de la Argentina hasta que se demuestre lo contrario". Y ayer, en diálogo con Dos de Punta durante un alto en los ejercicios en Punta del Este, destacó: "Hubo momentos en los que el equipo jugó muy bien. Pero es difícil, claro. Por momentos se logró. Desde la fecha 10, por ejemplo, el equipo respondió en partidos importantes, como contra Argentinos, Olimpo, Huracán, con uno menos en Santa Fe". Y entonces, sin la necesidad de ser peyorativo contra las frustraciones de Boca, subrayó: "El título fue un lindo premio al esfuerzo. Quedó un lindo sabor después de varios años sin ganar un campeonato. El grupo trabajó a conciencia, y casi sin darnos cuenta llegamos al lugar donde llegamos".
Enfocado. Entusiasmado. Y autocrítico. Simeone insistió con su teoría de que la remontada contra Banfield, después de ir perdiendo 2 a 0, "fue una muestra de que más allá de lo que se había obtenido, el equipo había logrado pensar siempre en ganar", y entre cauto y diplomático, no quiso sobrevalorar la importancia de la Copa sobre el torneo local y viceversa: "Cuado quedás afuera de uno, es más importante el otro. Es un juego de palabras. Los equipos grandes necesitan participar en todo. Lo importante es ganar algo. De acuerdo a cómo se den los torneos, nos inclinaremos por uno o por otro", aclaró. ¿Si ahora va por el bicampeonato? "Voy por ganarle a Colón. Hay que ir partido a partido", se excusó.
Distendido, locuaz, y optimista, el DT le repartió flores a Buonanotte ("tiene una gambeta fantástica, su crecimiento físico y táctico lo hizo un jugador más completo") y hasta esgrimió argumentos para justificar sus arranques de teatralidad en el banco de suplentes: "Debo manejar el equilibrio personal. Era un semestre importante, no ser de la casa y llegar con la responsabilidad que había, que hacía mucho no se ganaba, hizo que me acelere. Lo vi en Mancini, que en la fecha 20, el Inter volaba y él no se movía. Per al final del torneo, iba de un lado a otro... Además, si los jugadores miran afuera y ven un tipo sentado dicen: "¿Dónde está el entrenador?'".
Primero, CarIos Ischia minimizó el logro del equipo de Simeone desde La Boca. Pocos días después, Dátolo se sumo al discurso de su DT. Y luego, en sintonía, Morel juzgó la falta de respuesta de River en la eliminación copera. Hasta que apareció el Cholo, y con su verba ágil, puso las cosas en su lugar. En contra de la sentencia futbolera, el sí se acordó de los segundos. ¡Y cómo!
