Enero de 1988, Gerardo Martino, pieza clave del poderoso Newell's Old Boys de esa época se va expulsado contra Vélez Sarsfield. Además de la tarjeta roja, su equipo perdió 1-2. La falta fue contra un joven talentoso de la cantera velezana, Diego Simeone.
Newell's fue campeón de la Liga argentina al final de esa temporada, y Martino, una de las figuras. Al siguiente torneo se volvieron a enfrentar y otra vez ganó Vélez. El 1-0 lo marcó un "Cholo" Simeone más asentado en la primera división. En la segunda rueda, el duelo terminó 2-2, y "Tata" Martino materializó uno de los tantos.
La carrera de ambos continuó. Martino emigró al fútbol español, volvió a la Argentina, jugó en Chile y se retiró en Ecuador. Simeone se mudó a Italia, pasó por España y cerró su carrera de jugador en Racing. No se cruzaron en la Selección Argentina, tampoco fueron rivales dentro de los campos de juego europeos.
En junio de 2005, Simeone daba sus primeros pasos como entrenador en Racing Club, y enfrentaba al Colón de Martino, que probaba sus cualidades en la Argentina luego de un exitoso paso por el fútbol paraguayo. Fue un empate de 2-2, idéntico resultado al de la última vez que se habían visto.
Tras malos resultados, Martino volvió a Paraguay. Consiguió más títulos y agarró la selección guaraní para llevarla al Mundial 2010. Luego salvó a Newell's del descenso y, tras los excelentes resultados, se transformó en el entrenador del Barcelona.
Simeone se formó en la Argentina: ganó títulos con River y Estudiantes. Dirigió a San Lorenzo y, tras un corto paso por el Catania de Italia, tomó nuevamente las riendas de Racing. De allí partió para triunfar en el Atlético Madrid, donde ya ganó la Europa League, la Supercopa de Europa y la Copa del Rey.
Ese último título le dio acceso a jugar la Supercopa de España 2013. Su rival sería el Barcelona, que había ganado la Liga BBVA con Tito Vilanova en el banquillo, pero que ahora tenía a Martino como técnico.
Desde que son entrenadores, ni Martino le ganó a Simeone, ni Simeone venció a Martino. Aquel 2-2 entre Colón y Racing contagió sus tres enfrentamientos en España: en la ida de la Supercopa de España en el Vicente Calderón (1-1), en la vuelta en el Camp Nou (0-0) y en la jornada 19 de la Liga en el Manzanares (0-0).
Este martes (18.45 GMT) volverán a medir fuerzas, esta vez por los cuartos de final de la Champions League. Barça y Atlético, con su duelo de entrenadores argentinos, están separados por un punto en la Liga española. Todavía les queda un duelo más, en la última fecha.
En la presente Liga de Campeones, un torneo en el que ambos hacen su debut, Simeone está invicto (siete triunfos y un empate), y Martino sólo ha cedido un empate y una derrota. La gloria europea está a la vista.
Sólo dos entrenadores argentinos han sido campeones en Champions: Luis Carniglia y Helenio Herrera. El primero lo consiguió en dos ediciones, en 1958 y 1959, al mando del Real Madrid, mientras que el segundo, lo logró con el Inter de Milán, también en dos ocasiones (1964 y 1965).
"Tengo la alegría de que en las semifinales va a haber un entrenador argentino seguro, así que eso tanto para Gerardo (Martino) como para mí es una buena noticia", valoró Simeone cuando se celebró el sorteo en Nyon (Suiza).
Martino y Simeone buscarán romper su seguidilla de empates, con la ida en el Camp Nou y con la vuelta en el estadio Vicente Calderón (8/4). Son "viejos conocidos" de la Argentina, pero ahora quieren triunfar en Europa.
